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sábado, 23 de abril de 2016

MÉXICO.



ANA GABRIELA CABRERA

- SABER AMAR –

Solitarias palabras se despliegan como el viento, con un dulce aroma pero dañan cual hierro, caricias vanas llegan con ellas, que presionan el cuerpo como cadenas, que alimentan al suelo con las gotas de sangre que fluyen del cuerpo, cual helado viento sopla en las montañas. son así tus palabras.
Quizá sea el momento, quizá solo sea el aviso, o tan solo una advertencia, de que tu no eres mío, que debo aprender a despedirme que debo dejarte ser libre.
Palabras irracionales se cuelan a mis oídos, los cubro con tierra y con olvido, será que no quiero desaparecer me aferro a no perder, solo tu y yo sabemos lo que es querer, se que ha llegado el momento, y si tanto te amo debo dejar que vueles, que encuentres todo aquel amor que te llene, recuerdes que te amo...
Me han dicho que el amor no es encierro, sino libertad sin miedo.


ANGEL VALDERRAMA RUBALCAVA

LA NIÑA DEL UNIVERSO

Tantas vueltas alrededor del sol,
bailando contigo y tu exterior,
con esos cristales titilantes
que brillan en el infinito oscuro.
Nos has permitido morarte,
bebernos la vida de tus mares,
y cobijarnos con tus ventiscas.
Nos obsequiaste sonidos etéreos,
visiones oníricas y psicodélicas.
danzamos bajo lunas y soles,
entre arcoíris efímeros
que anhelábamos congelar.
Nos regalaste tu aliento,
tus tormentas y tus lloviznas.
Te acariciamos entre dunas,
y viajaste entre nuestros dedos.
Escuchamos tus alegrias
manifestándose en canarios,
en mariposas revoloteando.
Sentimos tus temores y furias,
dejándonos sacudir y ahogar,
a otros los has desaparecido.
Tu seguiste bailando, incansable,
pero herida y ofendida,
sólo respondiste defendiéndote,
si, nos atemorizaste sin tregua,
éramos niños asustados corriendo,
gritando e implorando piedad.
Las oleadas no eran eternas,
pero si intensas y poderosas.
Sabemos que sientes y sufres,
que estas viva y acompañada,
eres la niña del universo,
No dejes de bailar.




CLAUDIA ELIZABETH CASTILLO VELÁZQUEZ

LLOREMOS

¡Lloremos amor, lloremos!
Lloremos por todo lo que no hemos llorado,
Desde que nacemos, lo venimos haciendo,
faltaría una vida entera para todo llorarlo.
Hay que llorarlo completo,
hasta poder casi secarnos,
Y así poder hidratar nuestra escencia,
del poder sentirnos amados.
Debemos sentir que el dolor,
sale de nuestros poros.
¡Debemos sentir que nos liberamos!
¡Que huimos de todo!
Lloremos amor, de verdad lloremos,
por lo injusta que es la vida;
y que a ratos sabemos...
¡Que también es bella y divina!
Llora corazón, derrámate por completo,
te permito que vueles,
que sueñes y abraces,
¡que renazcas por completo!
Suspiro y suspiro,
lentamente lo hago
y siento que fluyen
los fracasos de antaño.
Todas las dudas,
con miedos y resentimientos,
se disipan cuando mis lágrimas,
se hunden en el suelo.

Le agradezco a Dios
de que existan las lágrimas,
porque es la manera...
¡En que se limpian nuestras almas!







GUADALUPE ESPINOZA LAGUNA


Señora Luna

La noche ha tendido de sombras su manto
se escucha el rugido del mar que le llama
surge entre las sombras la pálida dama…
Lanzando destellos de magia y encanto.
Luego el mar se aquieta abrazando el reflejo,
la plateada imagen de un trozo de cielo,
cuando ella traviesa despliega su velo
como blanca novia frente al gran espejo.
El mar la acaricia, le canta y la besa
como ha hecho por siglos y noche tras noche,
cuando ella aparece haciendo derroche,
de su bella imagen... etérea princesa.
Dama blanquecina que inspiras canciones,
que al mar tan inmenso mueves con tu influjo...
Dama que mi férrea voluntad sedujo,
quedándote dueña de mis emociones.
¡Ay, Señora Luna que enciendes pasiones;
libera mi alma de tu dulce embrujo…!





JOSÉ FLORES

Mi Continente.

Miro a través de la cortina de la fina lluvia
tu figura entallada en la humedad de las telas
que cubren tu cuerpo ataviado de suspiros
y tu vaivén lleno de candor seduciendo mis ojos.
Llegas en el momento preciso, donde mis tormentas
se acotan en tu pecho y mi furia encuentra su calma
arropando tu cuerpo entre mis brazos 
que dejan al descubierto tus secretos más bellos.
Desbordo este rio impetuoso en las cordilleras
que dividen tu vientre y tu pecho,
mis manos erosionan tus valles en este amanecer
donde mi aliento sopla de norte a sur.
Cruzo frenético tus planicies y mis aguas
acarician tus playas dejando en ellas 
las marcas de mis pies desnudos,
acotando tus pasos en el recorrido nocturnal.
Mis carnes tiemblan frenéticas
recorriendo las fronteras entre los pliegues
que dividen tus continentes
y miro la profundidad de tus ojos castaños.
Me pierdo en la cristalina profundidad
de esos luceros que me miran por la noche
y llenan mis paseos por tus constelaciones
grabadas a lo largo de tu espalda desnuda.
Bebo de la profundidad de tus entrañas,
de ese rio caudaloso que da vida
a esta planicie llena de piedras preciosas,
dejando en mis labios su dulce sabor.
Escalo tus montanas para internarme en ti
entre esas cordilleras llenas de ajonjolí
y mordiendo tus frutos secretos
en las noches llenas de lunas azules.
Y me pierdo en tu selva negra 
escuchando el canto de las sirenas,
cantando bajo las áureas boreales 
donde nuestros cuerpos yacen.


Excursión.

Mis ansiedades se desprenden
como gotas de lluvia cubriendo
tu cuerpo bajo la luna platinada
que acaricia tu cuerpo desgarbado.
Secuelas del tiempo derramando
sus mieles en caricias caprichosas
que moldean tus caderas
llenas de fuego volcánico.
Mis ojos se pierden en tu universo,
en esas lunas eclipsadas
que desmenuzan mis noches
en vela recorriendo tu piel.
Mis versos hacen eco en tus cúspides,
en esos senos airosos que alimentan
mi imaginación desbordada,
entre tus valles y praderas.
Soy el explorador que se aventura
en tu geografía llena de dulces ríos,
agua cristalina y eterna noche
que claudica en mis manos.
Es este amanecer lleno de ti
de tu fragancia silvestre,
del sol que baña mi cuerpo
y tu brisa humedeciendo mi rostro.
Son estas ansias llenas de ti,
de tu pasión cargada de suspiros
de tu amor lleno de canciones
y mis manos llenas de versos.

Escribiendo en su bitácora
nuestra historia llena de amor
llena de recuerdos gratos,
llena de mundo, llena de ti.


LUCILA REYES GONZALEZ

Querida Tierra

Eres bella en lo vivo y en lo muerto,
galería de colores en el cielo,
un atardecer en el desierto
una magnifica postal en el hielo.
En el más hermoso paisaje submarino
me provocas ensueño y fascinación
ganas de componerte una oda, un himno.
o cantarte apasionadamente una canción.
Por ignorante te causo daño
por inconsciente acabo con tu esplendor
sí con tus especies me ensaño,
no es por vileza, es por error.
Un día cualquiera, ya no estaré
Pero tu seguirás subsistiendo,
Al polvo eterno regresaré…
Y en aguas y tierra seguirás viviendo.
Te agradezco tu paciencia, tu nobleza,
solo soy un pequeño virus que te enferma,
que morirá un día con su pretendida grandeza
mientras que tú, seguirás siendo eterna.





MARIA LUZ OLIVARES ALDANA

TORMENTAS

La tormenta del cielo
con nubes quejumbrosas
del color del cuervo
y lacerantes brazos
rasgan el cielo.

Se estremece la tierra
retumban las nubes
que despanzurra el viento
y desgrana sus gotas
en lágrimas de hielo.

Hay otras tormentas
entre ellas la nuestra
donde el corazón del hombre
se desgarra, llora, se queja
e impotente mudo queda.

Porque la muerte llega
desmorona vidas
la tuya, la mía, la ajena
cual si fuera castillos de arena.

Con balas y granadas
asesinan inocentes
y en bolsas negras
cuerpos desmembrados,
casas abandonadas
y muchas,  muchas
fosas con huesos.

Madres que buscan hijos,
padres enloquecidos…
poetas entristecidos
y de herencia ciento
de niños  huérfanos.


Estas tormentas
tienen un sin número
de amargas lágrimas
tanta tristeza y llanto
que de tantos ayes
se los lleva el viento.

Y éstas viejas letras
escritas en mi libreta
por no decirlas fuerte
ahí gritando quedan.





PATRICIA AMADOR

Cierto...


El tiempo se llevó mis sueños, pero no tu recuerdo. Son visiones lejanas de apagados encuentros. Veo nuestras sonrisas brillantes iluminando cuartos vacíos, de rosas y llenos de besos, no logro capturar bien la escena, ni el momento, tampoco ubico en el calendario las fechas exactas de los acontecimientos .¡He vacilado con mis vivencias! ¡He conjugado una fábrica de reencuentros! ¿Qué no distingo si te vi en el cine o en algún café. cual fue la playa en nuestro cuento? . Exijo saber más de esta historia borrosa. Aclarar pensamientos reescritos. Quiero saber todo cuanto fue, y de todo, cuanto fue cierto... 


RAMÓN DE JESÚS HERNÁNDEZ OLIVARES

SOLEDAD QUE MATA

Siento un nudo en la garganta
lleno de espinas,
quemando mis ansias, los sentidos
y mi alma.

Miro cada segundo que pasa
detrás del cristal
de un reloj de pared
roto y polvoriento.

Me duele el silencio
que mata los aullidos de la noche,
mientras una lluvia de ideas locas
limpia la ventana.

Mis manos temblorosas
por la ausencia del abrazo,
que entre sueños de madrugada
nos entrelaza.

Cierro mis ojos
buscando tu imagen grabada
en recuerdo o  melodía,
que danza entre espectros
que delinean tu silueta,
¿Y yo? Imagino besar tu espalda.

Al filo de la noche atormentada
observo que en el lecho,
existe un aroma más bello
impregnado en la almohada.

Enloquezco entre miradas perdidas
de puntos cardinales de una habitación vacía,
que implora tu voz,
tus carcajadas.

Si en instantes escucho tu respirar agitado
mis manos se aferran a mi cara,
para detener la pesadilla
de una locura de amor, que avanza.

Estás en distancias  donde el camino se viste de tristeza, llora el ave errante,
triste la sombra del pensante,
voz callada de los gnomos ausentes.

¿Y mis musas?
¡Muertas!
Entre rosas negras.

En esta soledad que mata
camino arrastrando  la pena de tu olvido

mientras la lluvia canta.

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